1.31.2012

Impactos musicales

Recientemente Jack White ha tomado la posta en los días de la vita Skorpium. Preguntarse por qué hay canciones que te impactan más que otras se relaciona con todo lo que nos sacude. Imaginarse a los taxistas sin la cumbia pasando por el Terminal pesquero me parece inverosímil. La Fania en su esplendor sonando entre las cachitas de los obreros saliendo de las fábricas, los torneros del ayer tarareando valses de Felipe Pinglo, las adolescentes de los 90's eufóricas con Britney Spears, los románticos y los boleros, la tragicomedia de Almódovar con Poquita fé,  el pasado deslumbrante de los Beatles, el boom  de Billie Holiday entrando por la cocina del lugar donde cantaba porque era negra y los negros no podrían entrar por ninguna puerta principal aunque fueran los cantantes. La sexualidad de los Rolling Stones, el complicado y maravilloso jazz de Cecil Taylor, los frescos eróticos de Miles Davis, la voz de Björk marcando tu primer enamoramiento. Los muchachos de Arcade Fire, con canciones que se parecen a esos veranos ideales donde somos irresponsables y traviesos. O Skinny Puppy sin dulzura cayendo sobre la memoria, torciendo la sonrisa. 
Son demasiados referentes que se agolpan en las experiencias personales mezcladas con las ¿generacionales?. Son la relación de una canción que sonaba mucho cuando tiraban bombas en las calles de Lima, por ejemplo. Freddy Mercury irrumpiendo con su falda y sus tacos en un video a color. El brillo de Queen en medio de la sangre. 

O pensemos en esas sinfonías que papá te ponía en cassettes antológicas. Un alegre Mozart trayendo praderas iluminadas a tu casa, castillos renacentistas, hadas y princesas. O recordarte palpando vinilos de Beethoven y enterarte que era sordo. Lo injusto como gran colofón. Y las películas con sus soundtracks, los drogos de La Naranja mecánica con su líder apasionado por la quinta sinfonía de Ludwing Van, el titán Beethoven.

Algo siempre ocurre con las canciones o son las canciones que se cruzan con los momentos de definición o de cambios, de instantes simples o de caminatas largas, inviernos que se extienden al verano y lo llenan de frío. Canciones terribles sin las que la atmósfera que necesitas estaría incompleta. Canciones que se quedan en el cuerpo, que son también el cuerpo. 
Canciones que son cicatrices.
Canciones que son talismanes.
Canciones que son memoria.

Mi canción del momento, una canción de verano es ésta, ahora, cuando lees este post y cuando alguien lo lea otra vez, lejos de este día, resonando como una respuesta, porque las canciones son preguntas y respuestas al mismo tiempo.



No comments: